Los días de Diego Simeone al frente de River estarían contados si es que no media un cambio de planes, ya que los hinchas están más que molestos con el entrenador responsable de la pésima campaña del equipo.
A pesar del deseo del presidente de la institución, José María Aguilar, para que "el Cholo" continúe al frente del primer equipo, los resultados mandan y éstos son pésimos , sobre todo por el último lugar en la tabla de posiciones del Apertura y la eliminación de la Sudamericana, a manos del Chivas, de México.
En la carrera por suceder a Simeone, entonces, el primero en las preferencias es Américo Rubén Gallego , quien no sólo cuenta con un gran pasado como jugador de la entidad, sino que también tuvo un gran paso como entrenador, primero junto a Daniel Passarella y luego en soledad.
En Gallego, la dirigencia ve no sólo cualidades para el cargo, sino también lo positivo de su identificación con el hincha , algo que no pasa con Simeone.
El domingo, en el choque ante Huracán por el torneo local, puede haber novedades si las cosas siguen mal y River continúa con su debacle.
En tanto, el otro nombre posible, pero muy lejos al menos por ahora, es el de Nery Pumpido, quien ya tuvo reuniones anteriormente para ocupar el cargo.
Ramón Diaz, en cambio, no tendría el apoyo necesario en la dirigencia. Y de tornarse hacia él, la balanza se inclinaría sólo por el peso de su gran relación con el hincha y el aval de las buenas campañas realizadas, que incluyen su exitoso paso por Núñez y el reciente por San Lorenzo.
sábado, 8 de noviembre de 2008
Abreu: "hay que seguir por el orgullo de vestir esta camiseta"
El delantero Sebastián Abreu destacó que pese a todo deben seguir luchando por el orgullo "que significa vestir la camiseta de River, en medio de un clima de dolor por la eliminación de la Copa Sudamericana.
"Hay que seguir por lo que significa esta camiseta y por el orgullo de vestirla. Siempre damos lo mejor de nosotros y tenemos el orgullo de salir a afrontar los partidos más allá de la situación en la que estemos", aseguró Abreu.
Al ex San Lorenzo de Almagro se lo vio contrariado después de la frustración en el certamen continental, a pesar de que se lo considera un referente positivo, que mantiene el humor, levantando la moral de sus compañeros en el día a día.
"El equipo jugó bien, impuso su ritmo y un estilo, pero el fútbol tiene estas cosas. En los partidos de Copa hay que tener claro que no se pueden cometer errores. A pesar del empate aumentamos las situaciones de gol, pero por diferentes motivos la pelota no entró", reflexionó.
El primer tiempo en el estadio Jalisco fue de lo mejor que mostró River en un segundo semestre de 2008, que será recordado por la peor campaña en el ámbito local de la historia para los millonarios, mientras que en el complemento tuvo dos desatenciones y después no pudo hacer evitar la eliminación.
"Ellos se encontraron con el descuento por un error nuestro y después se agarraron de eso para ir por el empate. Tuvimos situaciones y fuimos con todo a buscar ese gol, pero no pudimos revertirlo", apuntó Abreu.
La continuidad del entrenador, Diego Simeone, está en duda más allá de que los dirigentes quieran su continuidad, pero para Abreu los responsables del mal momento son los que salen a la cancha.
"No somos chicos para hablar de culpas. Sí considero que es un tema de responsabilidades. Siempre la responsabilidad es del jugador porque es el que sale al campo de juego a buscar los resultados", consideró.
"Ahora tenemos la obligación de pensar en el domingo contra Huracán y conseguir una victoria para mejorar las cosas y vernos más arriba en el torneo", agregó.
Este fue el último partido de Abreu en el semestre, porque sólo está inscripto en la Copa Sudamericana después de su breve paso por el Beitar Jerusalén.
Por su parte, Matías Abelairas fue el otro futbolista que dio la cara, resumiendo en una frase lo que fue el partido y por la situación que pasa junto a sus compañeros.
"Dimos todo lo que teníamos, fue lo mejor que hicimos y jugamos muy bien, creamos situaciones, pero el fútbol tiene estas cosas y hay que seguir adelante, pensando en que ell domingo hay que levantar", enfatizó.Simeone renunció en México y se despediria en el partido ante Huracán
Diego Pablo Simeone "renunció" ante la cúpula de la dirigencia de River Plate en México a su cargo de director técnico después de la eliminación de la Copa Sudamericana de su equipo ante las Chivas de Guadalajara.
La información procedente de México, de los enviados especiales de la señal de cable Fox Sports, completó el detalle consignando que Simeone se habría comprometido a dirigir por última vez el equipo el próximo domingo ante Huracán, por la decimocuarta fecha del Apertura.
Paradójicamente, el equipo millonario, según quienes lo ven habitualmente, realizó en México una de sus mejores actuaciones del semestre, pero el empate 2-2, después de ir ganando 2-0, lo dejó fuera de la Copa por haber perdido el partido de ida por 2-1.
Si bien Simeone mantuvo una primera reunión con José María Aguilar y otros dirigentes en la madrugada, la formalización de la renuncia la habría hecho hoy después del entrenamiento del plantel, al cabo del cual Simeone y sus colaboradores se retiraron en un auto particular, separados del plantel.
CHIVAS 2 - 2 RIVER
El club mexicano Guadalajara logró su pase a las semifinales de la Copa Sudamericana 2008 al empatar 2-2 con River Plate, la noche del jueves en partido de vuelta de los cuartos de final.
Gustavo Cabral, al minuto 2, y el colombiano Radamel Falcao, al 20, anotaron para River. Marco Fabián, al 59, y Alberto Medina, al 64, marcaron para las Chivas, que ahora enfrentará al brasileño Inter de Porto Alegre.
River salió al campo con la determinación y la precisión necesarias para resolver su encomienda y ya había puesto un pie en las semifinales antes de que se cumpliera la primera media hora, aprovechando el pánico escénico que el Guadalajara manifestó a lo largo de toda la primera parte.
Los 'millonarios' tuvieron opciones para sentenciar la eliminatoria, pero no las aprovecharon y en el complemento pagaron las consecuencias porque las Chivas se volcaron a la ofensiva hasta recuperar todo lo que habían perdido en la cancha y en el marcador.
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